Puede parecer que todo está surgiendo en Marte últimamente, pero la exploración del planeta rojo por parte de la NASA golpeó un bache de velocidad esta semana. Un corto circuito en el rover Curiosity ha forzado un retraso de varios días a medida que los técnicos descubren lo que está sucediendo.
En un comunicado, la NASA describió la falla como un "cortocircuito transitorio" que ocurrió mientras el rover estaba ocupado transfiriendo polvo de roca a una cámara de análisis utilizando su brazo robótico. La curiosidad está programada para deshabilitarse cuando detecta irregularidades en su cableado, por lo que detuvo el brazo y se quedó quieto mientras los técnicos realizan las pruebas.
El gerente de proyecto de Curiosity, Jim Erickson, dice que la NASA no conducirá ni moverá Curiosity hasta que complete las pruebas, y que aún no está seguro de cómo el corto afectará la misión a largo plazo. (Podría tener "poco efecto", o podría restringir el uso del brazo robótico del rover u otros mecanismos).
Space.com informa que se espera que el rover permanezca en su lugar durante al menos unos días. No será la primera demora para Curiosity, que se ha recuperado de fallas en la computadora, daños en las ruedas y otros desafíos desde que aterrizó en Marte en 2012.
Pero mientras Curiosity hace una pausa, hay muchas otras noticias de Marte para considerar, como la posibilidad de que el rover esté destruyendo las moléculas muy orgánicas que está descubriendo en el planeta. En nuevos experimentos, los astrobiólogos han descubierto que un mineral llamado jarosita podría estar vaporizando moléculas orgánicas antes de que el vehículo pueda descubrirlas.