Desde que me mudé al oeste, he estado viendo dinosaurios en todas partes. Están enlucidos en carteles publicitarios, son los símbolos de las estaciones de servicio y, como descubrí cuando pasé por los Chocolates Hatch Family de Salt Lake City, se vendieron como deliciosos bocados de chocolate. Cuando me detuve en la confitería local, vendían estos cositas de saurópodos y estegosaurios de la vieja escuela. No tengo que decirte que fueron buenos. NOM!