https://frosthead.com

La última tecnología en almacenamiento de energía barata se fabrica con fabricantes de pasta

Una startup con sede en Manhattan llamada Urban Electric Power está apostando por el problema del almacenamiento de energía. Y en lugar de solo almacenar energía, la compañía va un paso más allá, al fabricar baterías completamente no tóxicas en lugar de la variedad habitual corrosiva llena de químicos.

Un gran problema con la energía renovable, incluida la energía eólica, solar y de las olas, es almacenarla. Si pudiéramos abastecernos de energía cuando el sol brilla intensamente o sopla el viento, entonces podríamos continuar produciendo energía por la noche o durante los días sin viento. La energía almacenada también puede compensar la demanda de energía en las horas punta, cuando las empresas de servicios públicos tienen que aumentar la producción.

Urban Electric Power está abordando estos problemas actualizando una tecnología de batería antigua. Energy.gov explica:

Barato, no tóxico y ampliamente disponible, se sabe que el zinc es un excelente material de almacenamiento de electricidad debido a su alta densidad de energía. Inventado hace más de 100 años, la batería del ánodo de zinc todavía se usa en la actualidad. Sin embargo, a pesar de todos sus beneficios, el zinc tiene un gran inconveniente: la formación de dendrita se desarrolla durante la vida útil de la batería, lo que hace que la batería se acorte después de unos cientos de ciclos.

Básicamente, los investigadores se han topado con un obstáculo al intentar aprovechar el potencial de la historia energética del zinc debido a la molesta tendencia de ese material a acumularse. Para solucionar este problema, Urban Electric Power diseñó una solución simple: simplemente agite el zinc. Informes científicos estadounidenses :

La clave para prevenir esa degradación resulta ser el flujo. En el caso de Urban Electric, eso significa pequeñas hélices unidas por imanes al fondo del recipiente de plástico que contiene una serie de celdas de bolsa de dióxido de zinc-manganeso. Los ventiladores circulan un fluido que evita que se formen fallas y que los iones fluyan dentro y fuera de los electrodos. Ese líquido también resulta barato: el agua. La convección de un poco de agua que fluye alrededor de las células de la bolsa evita la formación de pequeñas fibras en el electrodo de zinc, conocidas como dendritas, que matan una batería alcalina típica. "Usamos muy poco flujo", dice Banerjee. "Es realmente emocionante".

El diseño es tan simple que los creadores usan poco más que fabricantes de pasta caseros, agitadores de grado restaurante y rodillos para hacer los materiales químicos, agrega SciAm.

Más de Smithsonian.com:

Las cometas submarinas pueden aprovechar las corrientes oceánicas para crear energía limpia
No tenemos que elegir entre combustibles fósiles y energía verde

La última tecnología en almacenamiento de energía barata se fabrica con fabricantes de pasta