Aumento del nivel del mar. Temperaturas con picos. Derritiendo hielo. Más desastres naturales. Si no puede pensar en una razón para aplaudir el cambio climático, no se le puede culpar, pero, de nuevo, es posible que no sea un viticultor francés. Para ese subsegmento de la población de la Tierra, escribe Alastair Bland de NPR, las temperaturas más cálidas son motivo de celebración porque podrían hacer que el vino francés tenga un sabor aún mejor.
Antes de burlarse, considere la uva de vino. Las pequeñas frutas volubles son muy sensibles al clima: cuando hace frío, no maduran tan rápido y deben dejarse en la vid por más tiempo. Las uvas de cosecha tardía son mohosas, encogidas y menos abundantes; pueden parecer más pasas que uvas regordetas. ¿Y si se congelan en la vid? Olvídalo: una vez que una uva cae por debajo de cierta temperatura, solo es adecuada para ciertos tipos de vinos especializados. No es de extrañar, entonces, que las uvas cosechadas temprano estén asociadas con los vinos más deliciosos.
Los mejores vinos franceses siempre han dependido de algo fuera de lo común: la sequía. Debido a que las temperaturas en las regiones vitivinícolas europeas son normalmente suaves, esas áreas solían necesitar sequías para aumentar el calor y lograr la maduración de la fruta.
Y ahí es donde entra el cambio climático. Un nuevo artículo publicado en la revista Nature dice que el cambio climático ahora ha debilitado la relación entre las sequías y las temperaturas cálidas en Europa. Los investigadores escriben que "el cambio climático ha alterado fundamentalmente los impulsores climáticos de las primeras cosechas de uva de vinificación en Francia", acelerando las fechas de cosecha en casi ocho días en promedio.
La temperatura no es lo único que hace un gran vino. Como Smithsonian.com informó en 2014, la Tierra misma también debe agradecer: los terremotos de ambas regiones en forma, como el Valle de Napa, crearon las condiciones perfectas del suelo para el cultivo de uvas. Pero cuando se trata de eso, las condiciones de cultivo pueden hacer o deshacer una cosecha de vino.
Bland escribe que la nueva información sobre el cambio climático podría ayudar a los enólogos a tomar decisiones más informadas sobre cuándo cosechar uvas, pero señala que también podría presagiar un punto en el que las temperaturas simplemente superan lo que es bueno para las uvas. Traducción: El calentamiento global puede haber mejorado lo que hay en su vaso por ahora, pero en el futuro podría agriar a toda una industria.