Oryctodromeus no es exactamente un nombre familiar. Un pequeño ornitópodo herbívoro que se encuentra en la roca del Cretácico tardío en el oeste de América del Norte, era el tipo de dinosaurio más a menudo representado como presa de carnívoros carismáticos. Pero había al menos un aspecto del Oryctodromeus que lo hacía particularmente interesante: este dinosaurio pudo haber vivido en madrigueras.
Según el contexto de las rocas en las que se encuentran, sabemos que los cuerpos de los dinosaurios se conservaron en una variedad de entornos diferentes. Algunos cuerpos fueron cubiertos por inundaciones estacionales, otros dinosaurios fueron arrastrados al mar, y los dinosaurios incluso murieron en trampas mortales creadas por las huellas de especies aún más grandes. Pero hasta Oryctodromeus, los dinosaurios no se habían encontrado en guaridas fosilizadas.
El hecho de que los pequeños dinosaurios habían sido enterrados dentro de una madriguera quedó claro por los detalles de su guarida. Al final de un túnel en forma de S había una gran cámara que había sido excavada en tres capas diferentes de barro y luego llena de arenisca. El hecho de que se encontraron un Oryctodromeus adulto y dos juveniles en la piedra arenisca confirmó que se trataba de una cueva que había sido inundada por una mezcla de agua y sedimento arenoso.
¿Pero los dinosaurios fueron enterrados dentro de su guarida, o sus cuerpos fueron lavados adentro? Los huesos de dinosaurio estaban revueltos en lugar de estar acostados en poses articuladas en el suelo de la madriguera. Esto dejó en claro los detalles de su preservación. Para resolver este misterio, los paleontólogos Cary Woodruff y David Varricchio crearon un modelo a media escala de la madriguera original con tuberías de PVC y realizaron experimentos con conejos para ver qué tipo de escenario explicaría mejor la forma en que se preservaron los fósiles de dinosaurios.
Los paleontólogos realizaron trece ensayos llenando su madriguera artificial con una mezcla de agua, arcilla y arena. Sin embargo, en lugar de usar conejos enteros, Woodruff y Varricchio solo usaron esqueletos desarticulados. Esto se debe a que no se encontraron huesos de Oryctodromeus en sus posiciones naturales, lo que sugiere que los dinosaurios murieron, se descompusieron y se habían desmoronado en su mayoría antes de su conservación. Para cuando la guarida se inundó, los dinosaurios ya se habían convertido en pilas de huesos (independientemente de si sus esqueletos estaban dentro o fuera de la madriguera en el momento del evento).
Woodruff y Varricchio modelaron las diferentes formas en que los huesos podrían haber encontrado su camino en el estudio al realizar una variedad de pruebas. En algunos ensayos, los huesos se colocaron en la madriguera, mientras que en otros se incluyeron en la mezcla de sedimentos utilizada para llenar el foso artificial. Cada configuración produjo una distribución diferente de huesos en la cámara de PVC.
Seis ensayos diferentes con diferentes condiciones crearon el tipo de ensamblaje elevado y disperso de huesos que se encuentra en la madriguera Oryctodromeus . Los huesos estaban inicialmente dentro de la cámara durante cuatro de estos ensayos, pero estaban fuera de la madriguera y contenidos dentro del sedimento, respectivamente, en los otros dos. Si bien esta evidencia respalda la idea de que los huesos de dinosaurio pueden haber estado dentro de la guarida cuando se inundó, es posible que los huesos se hayan lavado desde afuera.
Sin embargo, si los esqueletos de dinosaurios realmente fueron arrastrados a la madriguera desde afuera, argumentan Woodruff y Varricchio, es extraño que los huesos de un adulto y dos juveniles se encuentren juntos. Además, los huesos transportados por inundaciones llenas de sedimentos a menudo se rompen y desgastan, y no hay signos de tal transporte destructivo en los fósiles de Oryctodromeus . La hipótesis de que los huesos Oryctodromeus ya estaban dentro del estudio sigue siendo la idea mejor respaldada. Woodruff y Varricchio advierten que se requieren más investigaciones para comprender cómo se preservaron estos dinosaurios, y otros vertebrados fósiles que habitan en la guarida.
Referencias
WOODRUFF, D. y VARRICCHIO, D. (2011). MODELADO EXPERIMENTAL DE UN POSIBLE CUBICULARIS ORICTÓDROMO (DINOSAURIA) PALAIOS DE BURROW, 26 (3), 140-151 DOI: 10.2110 / palo.2010.p10-001r